viernes, 28 de agosto de 2015

Cuando un buho quiere descansar

Cuando un buho quiere descansar 


Que paz se siente aquí, casi como si nada tuviera sentido y al mismo tiempo, se pudiera comprender hasta lo mas incomprensible… me siento extrañamente feliz y tranquilo, todo esta bien, tan bien que no quisiera regresar.

Recuerdo que me contaron un dia: “Cuando un búho quiere descansar…

…Solo se posa en la rama y mira pasar el tiempo, girando su mirada  de un lado a otro, entra en el reposo, suave y dulce ensoñamiento que le lleva donde su diario vuelo no le alcanza, y puede posarse en los rayos de la luna que ilumina el amor de la noche llena de pensamientos como agua que fluye del precioso manantial.

Allá los grillos cantan, haciendo el sonido de los antiguos cantos dedicados a las esencias, alegres luciérnagas elevan su tímida pero poderosa luz en la oscuridad, siento el paso de los que anduvieron en este lugar antes de mi, y percibo a los que lo caminaran aun después de mi, no hay zozobra, el espirulante tiempo, no es medible por el ojo apócrifo que solo sabe andar en línea recta.

No podría mostrártelo, quizá lo entiendas como respuestas o estímulos cerebrales, pero eso es ciencia, y dejándola de lado con el respeto que merece, no existe ciencia alguna que explique lo que se siente en cada sentimiento que abordamos dia con dia con la gente que nos rodea, y por gente, no me refiero al humano, sino a todo lo que tiene esencia, energía, aun lo que no parece tener vida.

Se eleva el corazón de la piedra, salida de las serpientes petreas gigantes que rodean este valle donde mora la vieja madre que deja emerger la energía del valle, haciendo que los frutos salidos de las coloridas flores, llenen el espacio de ojos propios y ajenos, algunos que agradecen, otros que ni los toman en cuenta, he aquí, la realidad de lo que compartimos, esta ahí, pero no todos gustan de apreciarlo.

El canto de un alegre colibrí, suena a mi alrededor, le sigue el del gorrión, el urraquin, y el centzontle, todo se equilibra, aun el viejo tlacuache que mira desde lejos, parece estar tranquilo, sin inmutarse dela pequeña serpiente que le hace una danza ondulante con medio cuerpo durante unos segundos, hasta que prefiere alejarse.

Tengo ganas de volar mas allá de donde los ojos de la conciencia alcanzan a comprender la eternidad de la energía dual sentir que mi cuerpo, se esparce en todo el universo de la mente y olvidar lo que fui, para tampoco pensar en lo que seré solo quiero soñar, y por siempre ser parte de un ayer de los demás para que al fin un dia, nadie mencione mi nombre ni por error es hora de andar el ultimo camino florido que dejaron los abuelos.

Pero aun habrá que caminar otro rato, por eso aun cuando cuesta salir de ese ensoñamiento, se debe salir, la luna sonríe, algo debe haberle gustado, alla a lo lejos el rojo color que es como nuestra sangre, anuncia la llegada del pequeño guía que dia con dia muestra que aunque parezca cíclico todo, se debe continuar, el cambio esta en lo que sucede mientras recorre este lugar, este ahora.


Ya habrá tiempo de soñar…pero ahora, es tiempo de realizar sueños.

Quiauhcoatl Tlacatecolotl
Calpulli Tlachcocan in Tlazohtla
Malacachcoatl Tenchicahuac Tlamachtilia
Tozoztontli, 2015 Yei Acatl.

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